Por qué merece la pena tener un segundo par de lentes

No es un lujo, es algo muy inteligente: tener un segundo par de lentes no sólo tiene sentido si quiere cambiar de look o quiere mantener la seguridad cuando ha olvidado o perdido su par de lentes principales. Para todos aquellos que tengan presbicia o usen lentes de contacto o para aquellos que trabajen delante de un computador, incluso para protegerse del sol o para hacer deporte, el segundo par de lentes será con frecuencia lo único que les proporcionará una visión perfecta y relajada.

No todo el mundo tiene un segundo par de lentes, aunque todo el que lleva lentes debería pensar en tener uno, y no sólo para marcar tendencia y ayudarle a cambiar de look. Podrá echar mano rápidamente del segundo par de lentes cuando no pueda encontrar el otro par. Un segundo par de lentes puede salvar vidas en caso de emergencia, especialmente en casos de visión muy deficiente. Cuando personas con visión deficiente pierden o rompen su par de lentes principal, les resulta muy difícil manejarse y se sienten indefensos. Y eso no es todo: en muchas situaciones y lugares, tener el par de lentes de repuesto correcto garantiza una visión especialmente buena, adaptada a las condiciones existentes.

Los usuarios de lentes de contacto deben plantearse la compra de un segundo par de lentes de alta calidad. Es algo que resulta especialmente útil durante los viajes o en vacaciones. Resulta muy fácil perder una lente de contacto. Así que, las personas que dependan de las lentes de contacto para poder ver, sólo disfrutarán de la mitad de sus vacaciones. Sobre todo porque, cuando se sale de vacaciones al extranjero, no resulta nada fácil encontrar un par de repuesto.

Los usuarios de lentes de contacto también suelen utilizar las lentes por la noche en sus casas para relajarse. Compruébelo usted mismo.

A los usuarios de lentes progresivos les suele resultar útil utilizar las lentes de lectura como segundo par de lentes; gracias a su amplio campo de visión específico para el rango de cerca, garantizan una lectura relajante.

Quizás no todo el mundo sepa que un par de lentes de repuesto también puede ayudarle a concentrarse en el trabajo, ya que consiguen una visión más relajada. Y esto es posible gracias a la M.I.D. La abreviatura corresponde a Distancia Intermedia Máxima y se trata de una nueva tecnología desarrollada por Carl Zeiss Vision para determinar la distancia focal máxima para satisfacer las necesidades específicas de los usuarios. Permite ajustar los lentes graduados de ZEISS a la agudeza visual y al rango de visión requeridos en el entorno de trabajo individual de cada usuario. El resultado: lentes de clase óptica con un campo de visión muy amplio para distancias cercanas e intermedias (desde uno hasta cuatro metros) para conseguir una visión óptima. Eso le permite ver y trabajar de manera óptima justo en el rango de visión que su trabajo le exige.

Las lentes de sol son un tipo de lentes en el que es especialmente importante tener un par de repuesto. Se trata de mucho más que un simple accesorio elegante, ya que protegen sus ojos de los dañinos rayos ultravioleta. Los lentes de sol de precisión de ZEISS están disponibles para todo tipo de prescripción, en varios tintes, grados de polarización y colores, personalizados para sus necesidades individuales. Unos buenos lentes graduados absorben al menos el 99 % de la radiación. Además, los filtros de polarización bloquean la luz reflejada, como la de que aparece sobre la superficie del agua.

Las lentes para actividades deportivas tienen que ser  duraderas, fuertes, ligeras y cómodas. Dependiendo del tipo de deporte, pueden equiparse con toda una variedad de características especiales adicionales, como tintes, filtros de polarización o lentes curvados. 

Sin embargo, no existe un tipo universal de lentes para actividades deportivas. Existen lentes óptimas y lentes graduados apropiados para casi todos los deportes. Indique a su optómetra qué deporte realiza y describa exactamente cómo quiere que sean sus lentes para actividades deportivas.

Es algo que se cumple en todas las situaciones: aquellos que tienen a mano un segundo par de lentes, están más seguros. Asegúrese de que sus lentes de repuesto estén ajustadas para la misma agudeza visual que sus lentes principales.