¿Cuál es la diferencia entre los lentes personalizados y los lentes "de serie"?

A simple vista no se puede distinguir entre unos lentes personalizados y unos "de serie". Entonces, ¿dónde radica la diferencia? ¿Qué usuarios de lentes sacarán el máximo partido de los lentes personalizados? MEJOR VISIÓN pregunta a Volker Gahr, Senior Product Manager en Carl Zeiss Vision.

Volker Gahr: Bueno, como es lógico incluso los lentes convencionales están en cierta medida personalizados para el usuario. Simplemente porque se elaboran conforme a una receta: se configura la graduación adecuada en la posición correcta de la montura seleccionada para que el usuario pueda ver mejor. Si otro usuario emplea estas gafas, lo más probable es que no vea bien. Cuando hablamos de lentes "personalizados" de lo que hablamos es de tener en cuenta otra información personal relevante en el diseño óptico, calculando las superficies de lente que se ajustan a sus necesidades.

Por norma, el optómetra o el oftalmólogo realizará una refracción y escribirá la receta de las lentes.

¿Qué lentes se necesitan?

• Lentes monofocales para visión de amplio rango
• Lentes monofocales para visión de cerca (por ejemplo, gafas de lectura)
• Lentes progresivos
• Dioptrías, cilindros especiales...

El siguiente paso es que el usuario elija la montura. Este es básicamente el procedimiento convencional. Como es natural, un optómetra que prescribe unos lentes "de serie" medirá también el punto visual en ambos ojos con la montura seleccionada para garantizar el ajuste correcto de los lentes adquiridos de una empresa como ZEISS. No obstante, la posición definitiva de los lentes en los ojos del usuario, que viene definida por el estilo de la montura específica, no se tendrá en cuenta al realizar los cálculos de los lentes.

Volker Gahr: Esa es una diferencia crucial, pero no es la única. Cuanto mejor comprenda ZEISS cómo mira el usuario a través de los lentes con la montura seleccionada, más precisa será la fabricación de esos lentes y lograr que la visión del usuario sea lo más natural y óptima posible. Al final se logra un elemento de visión óptico perfecto que se ha personalizado conforme a sus necesidades individuales. Pero, para lograrlo, el optómetra debe determinar otros parámetros importantes, además del punto de enfoque del usuario al mirar a través de los lentes, y dichos parámetros deben tener una precisión de una ¡décima de milímetro!

Por ejemplo, ¿a qué distancia tienden a estar los ojos del libro o de la pantalla del computador? ¿A qué altura exacta mira el usuario a través del lente en la montura que ha seleccionado? ¿Cómo afecta la inclinación de la montura a la visión del usuario? Todo esto depende no solo de la montura sino también de la forma de la cara. ¿Cuál es la distancia del vértice posterior, es decir, la distancia entre la superficie posterior del lente y la parte frontal de la córnea? ¿Cuál es la curvatura de la montura? Se deben realizar medidas precisas de las dimensiones de la montura y de la altura y el ancho del lente.

Cuanto mayor sea la precisión de los cálculos de todos los parámetros realizados por el optómetra, mayor será el nivel de personalización que ZEISS puede aportar a la óptica, es decir, al diseño del lente. Para garantizar que la montura y el lente no acaben en una posición diferente en la nariz del usuario, la posición de la montura en el puente de la nariz la ajustará el optómetra antes de calcular los datos adicionales.

Volker Gahr: Aquí es donde entra en juego la tecnología. i.Terminal^®2 – el sistema de centrado de ZEISS – emplea una cámara de alta tecnología para tomar imágenes del usuario y de la montura de frente y de lado. A continuación, el software mide todos los datos clave para el centrado y los guarda en un archivo. i.Terminal^®2 logra una precisión de hasta una décima de milímetro y todo el proceso de medición es muy rápido, aunque ofrezca datos tremendamente precisos de todos los parámetros clave.

Volker Gahr: El optómetra recopila todas estas medidas de la refracción, el centrado y, en algunos casos, las medidas objetivas mediante i.Profiler^®. Cuando todas estas características están claras, como el material/tipo de lente, el tipo de revestimiento y el color o la sombra necesarios, los datos se envían a ZEISS. Ahora se calculan los lentes individualmente conforme a las especificaciones del optómetra y se fabrican con una tecnología de producción de última generación conocida como tecnología Freeform. ZEISS fue uno de los pioneros en el desarrollo de esta tecnología e, incluso en la actualidad, se esfuerza por mejorar este método de producción de lentes.

Gracias a la tecnología Freeform, los lentes se pueden producir exactamente conforme a las especificaciones de los usuarios y la montura seleccionada. De esta forma se logra la visión más natural para los usuarios de gafas y, especialmente en el caso de los lentes progresivos, se crean los rangos de visión más amplios y nítidos a todas las distancias. A menos que se consiga la armonía perfecta entre la montura, los lentes, las necesidades visuales individuales y la forma de la cara del usuario, no se podrá lograr una visión natural y relajada. Con una solución imperfecta, el usuario probablemente tenga que hacer grandes esfuerzos por fusionar las imágenes individuales de cada ojo en un todo coherente. Esto puede dificultar la adaptación a los lentes, provocando dolores de cabeza y tensión en el usuario.

Volker Gahr: Exacto. Comparémoslo con la imagen a través de un telescopio. Miramos a través de un sistema óptico muy sofisticado pero si el telescopio no está a la distancia adecuada de los ojos, el objeto se verá borroso. O piense en cuando mira a través de una cerradura. Solo podrá ver bien y de forma relajada si acerca mucho los ojos a la cerradura. La ventaja de un lente progresivo personalizado es que logramos que el usuario se adapte a las gafas desde el principio. Está claro que todo el mundo necesita tiempo para adaptarse a los nuevos lentes progresivos, y que este tiempo varía considerablemente en cada caso, pero en los lentes progresivos esta adaptación es mucho más rápida.

Volker Gahr: En general, podríamos decir que la mejor solución para todos es elegir unos lentes personalizados. Pero cuanto más compleja sea la receta, más se notará la diferencia con respecto a los lentes convencionales, y más relajada y sin estrés será la visión.

Aquellos con problemas de visión nocturna pueden emplear también nuestra tecnología i.Scription^® para personalizar individualmente la graduación para la visión nocturna o condiciones de poca luz. Esto resulta vital para aquellos cuya graduación varía cuando se dilatan mucho las pupilas. Los defectos de visión de cada persona se pueden eliminar con algunos pasos adicionales de optimización de la graduación. 

Pero existen muchos otros tipos de clientes que también pueden aprovechar las ventajas de los lentes personalizados. Por ejemplo, los lentes de oficina. Esta aplicación nos permite adaptar los lentes a las necesidades laborales de cada individuo, en particular en los rangos de distancias medios empleados con el computador u otras actividades similares. Es muy importante hablar con su optómetra, ya que puede saber claramente cuáles son sus necesidades de visión individuales y cómo satisfacerlas.